Los libros sagrados y la verdad única
¿Qué diferencia existe entre el Corán, la Biblia, el Libro de los muertos; y entre todas las escrituras de la sabiduría antigua? ¿Será posible que exista una verdad para cada pueblo y para cada época? ¿O será que, por el contrario, todos los libros sagrados son expresión de la verdad única?
Lo cierto es que si indagamos con algún practicante de cada culto religioso de seguro vamos a encontrar respuestas similares a preguntas como ¿Cuál es el objetivo de la religión? ¿Quién o qué es Dios? ¿Porqué envió a un profeta, Maestro, etc?
Y si nos tomáramos el trabajo de estudiar cada una de esas sagradas escrituras, veríamos con asombro las similitudes de su doctrina. Y si fuéramos más a lo profundo de lo que realmente quieren expresar, comprenderíamos que las diferencias son adaptaciones a la cultura de esa sociedad, a la época, a la necesidad del momento. Pero que en el fondo los libros sagrados revelan una verdad única, de la cual todos ellos emanaron. Porque fueron escritos, no con razonamientos de una mente humana, sino por inspiración. Y es apenas lógico, que se hallen diferencias en las historias, en la forma de la enseñanza. Ya que no es lo mismo la vida de los antiguos mayas, que la vida de la antigua India, o en la cultura china, egipcia, griega, romana, etc.
Pero, para poder comenzar a comprender todo esto, sería necesario que nos quitáramos los grilletes de nuestra propia cultura. Para poder ver el mundo y su historia, su significado, de manera universal. Y comprender lo integro, lo complementario, de las diversas civilizaciones que han existido. Comprender que todas son necesarias, que todas nos acercan a la verdad desde diferentes enfoques, pero que llevan a la misma Raíz.
Un recorrido por los textos sagrados
La Torá:
Para los judíos, la Torá, o Tanaj es el libro sagrado, cuando se refiere de manera completa. Torá o Tanaj es lo que se conoce como “Antiguo Testamento”. En él, que hasta el día de hoy el pueblo judío practica y predica, se encuentra la ley de Moisés. Moisés es el principal profeta que la religión judía tiene.
En la Torá se encuentra la guía cultural de la alimentación, los códigos del hombre para el hombre, los mandamientos de Dios para la humanidad. Dentro de la Torá se halla el libro del Génesis donde se relata la creación del mundo en 7 días por Dios. En la Torá se halla el cruce del mar rojo por los hebreos. También el viaje en el desierto donde por 40 días tuvieron que padecer hambre hasta que guiados por su profeta Moisés lograron llegar a la Tierra prometida.
El Corán:
Para los musulmanes, el Corán es el libro sagrado. Estudiado en todas las mezquitas del mundo, el Corán contiene las enseñanzas del profeta Muhammad, o Mahoma.
Muhammad impartió sus enseñanzas de labios a oídos de manera oral. Todos sus discípulos recopilaron sus enseñanzas en papiros, cueros, hojas de palmeras. Al momento de su muerte se registraron todas sus enseñanzas, quedando compiladas en la forma que hoy se utiliza.
Muhammad recibió las revelaciones que enseñaba del Ángel Gabriel. Y el Corán es un texto que hace profundo énfasis en el monoteísmo, es decir, en la creencia de un único y verdadero Dios. Prohíbe la idolatría, así como las imágenes de los profetas. También habla acerca de los profetas de otras religiones y les otorga el título de enviados o mensajeros de Dios. Entre ellos a Jesús de Nazaret, Juan Bautista, Noé, Adán, Moisés, Abraham. Todos los mensajes de los profetas, según el Corán, han sido idénticos y para toda la humanidad.
La Biblia:
Para los cristianos, la Biblia es el libro sagrado. La biblia como hoy en día se utiliza está compuesta por el Antiguo Testamento, y el Nuevo Testamento. El Nuevo Testamento se refiere completamente al profeta, enviado de Dios, Jesús de Nazaret, o Jesucristo, en sus primeros 4 libros, llamados Evangelios.
El primero es el evangelio de Mateo que inicia con la línea genealógica que comienza en Abraham, padre de Isaac, culminando en Jesús de Nazaret llamado Jesucristo.
Al nacer, una estrella en el cielo marca el nacimiento del Rey de los Judíos, y es la guía de los 3 Reyes Magos que van en su búsqueda. El Rey Herodes también busca al recién nacido para asesinarlo. Por eso la familia huye a Egipto y se mantiene a salvo hasta que puede volver cuando el Rey muere.
Jesús es bautizado por Juan Bautista, recibiendo así al Espíritu Santo. Entonces se oye a Dios como una voz en el cielo, decir que él es su hijo enviado. Recibe luego la prueba en el desierto, donde ayuna durante 40 días, y el diablo lo tienta tres veces. Al regresar, comienza a peregrinar buscando en cada poblado a sus discípulos de entre los Pescadores, y los que lo escuchaban.
Las enseñanzas de Jesús son fuertemente revolucionarias, poniendo en evidencia lo absurdo de las costumbres impuestas por los líderes religiosos de la época. Siendo perseguido por los mismos religiosos y líderes espirituales de aquel tiempo, Jesús fue el prototipo filosófico de la revolución verdadera, que en sus palabras, es cumplir con las leyes de Dios y los profetas.
Muchas culturas, una sola enseñanza
Entre otros actuales, que hoy en día se utilizan, encontramos en la India, el Bhagavad Gitá. En el budismo, el Tripitaka es la colección que contiene algunos de los textos budistas que hasta hoy se leen, y fueron entregados del mismo Buda.
Todos los textos sagrados en el fondo entregan la misma enseñanza. Porque, como hemos dicho, fueron escritos por inspiración. Además, pueden ser interpretados superficialmente o llevarnos cada vez a niveles más profundos de comprensión. Quien va hacia esa comprensión más profunda, empieza a comprender el objetivo de la existencia humana. Ese objetivo está expresado en todos ellos. Pero difieren en cuanto a las culturas y a la misión específica de cada profeta, sabio, maestro, enviado.
Todos ellos hablan de un pueblo de Dios, de un pueblo escogido, ese pueblo no se halla en una región exclusiva del planeta tierra, ni son quienes pertenezcan a tal o cual religión. Sino que son los hombres justos, aquellos que cumplen las leyes de Dios establecidas en cada uno de esos textos sagrados.
Entonces, de nada valen las discusiones acerca de cuál es la religión verdadera. Porque todas tienen el mismo fin, volver a unir al hombre con su Dios. Lograr el Re-ligare o religión. Tal como lo expresara el Budha “Todas las religiones son perlas engarzadas en el hilo de oro de la divinidad.”
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Por favor quiero indagar más sobre este tema. Gracias
Mi entender, todas las religiones son parecidas, todos hablan para ser perfecto y en busca de la perfección.
Estoy muy de acuerdo con lo planteado.
Me encanta todo esto, es muy interesante y además atrapante, ME GUSTARÍA TENER LA CAPACIDAD DE APRENDER MUY A FONDO DE TODO LO RELACIONADO A LA GNOSIS.
Gracias por compartir todo esto !! ?
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Muchas gracias por tu aportación. Feliz semana.
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